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RÍO+20

En el proceso por convertirnos en una sociedad más consciente en cuanto a los impacto que causamos en el medio ambiente y las acciones que debemos tomar para minimizarlos o incluso transformarlos, hace 30 años en Estocolmo 72’ se reunieron diferentes gobiernos en la conferencia sobre medio ambiente de la ONU, donde los líderes mundiales decidieron reunirse cada 10 años para realizar un seguimiento del impacto que las acciones humanas causa en el medio ambiente.20 años después, en 1992 se celebró la Cumbre de la Tierra de Río de Janeiro, recordada como el evento medioambiental más importante hasta el momento. Allí, los líderes mundiales adoptaron el plan conocido como Agenda 21, un programa de acción para el desarrollo sostenible global, que tenía como grandes áreas de actuación, la lucha contra el cambio climático, la protección de la biodiversidad y la eliminación de las sustancias tóxicas emitidas por el desarrollo global.Esto significó una invitación a los gobiernos participantes para conformar unos lineamientos que regularan las problemáticas ambientales en cada país. En Colombia se vio reflejado en la creación de la Ley 99 de 1993.Solo sería hasta la cumbre de Kioto de 1997, cuando se alcanzarían objetivos concretos para contrarrestar el impacto del calentamiento global y el cambio climático.

Sin embargo, fue luego de varios años de conversaciones que en el 2001 se logró un acuerdo vinculante de 180 países para la puesta en marcha del Protocolo de Kioto.Hoy, a 40 años de Estocolmo, a 20 de la Agenda 21 y después de 11 años de haber firmado el Protocolo de Kioto, se celebró nuevamente en Rio de Janeiro la Cumbre de la Tierra. En Río+20, nombrada oficialmente Conferencia de Naciones Unidas sobre Desarrollo Sustentable, se presentaron dos ejes principales: Una economía ecológica con vistas a la sustentabilidad y la erradicación de la pobreza, y la creación de un marco institucional para el desarrollo sustentable.Todo esto, sumado a la participación de 193 países, una cooperación nunca antes vista en una Cumbre de la Tierra, generó grandes expectativas en gobiernos y ciudadanos. Lamentablemente los resultados no fueron los esperados.El 22 de junio luego de dos días de Cumbre, los titulares de diferentes periódicos del mundo reflejaron la gran incertidumbre de ciudadanos, gobiernos y activistas con respecto a los resultados obtenidos.

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